Hacia una definición de la GEOSEGURIDAD. Integración y Convergencia


Una nueva tendencia metodológica y conceptual nos viene pidiendo paso de una forma irreversible en un mundo con imparables tendencias hacia la globalización.

Precisamos de un nuevo concepto para poder referirnos a problemas y soluciones tan nuevas por su dimensión y complejidad como por su conectividad, lo que requiere de una evolución del término de seguridad, confiriéndole una expresión tan plural y omniabarcante como las propias amenazas que lo determinan.

Avancemos pues en una definición de lo que proponemos llamar Geoseguridad. La Geoseguridad (del griego “geo” = tierra y el latín “securitas” = seguridad, se puede referir la seguridad a la ausencia de riesgo o también a la confianza en algo o alguien, sin embargo, el término puede tomar diversos sentidos según el área o campo de actividad y entorno al que haga mención.

La Geoseguridad sería entonces: el estudio de los aspectos espaciales, temporales y políticos que afectan a los recursos y su seguridad de forma global.

Este neologismo compartiría raíz con otros semejantes que vinieron a paliar la necesidad de definir la mundialización de las disciplinas que lo adoptan, como por ejemplo, geopolítica, geoestrategia o geoeconomía.

El objeto de la Geoseguridad

La Geoseguridad es una nueva ciencia que se puede definir más concretamente como: “el análisis de las estrategias en materia de seguridad decididas o influidas por los Estados dentro de los intereses que los animan, a fin de proteger sus activos (personas, bienes y patrimonio, actividades, etc.) en el contexto de la seguridad global, o para dotarse de las tecnologías y metodologías que consideran estratégicos para su supervivencia con seguridad sostenible o desarrollo futuro”.

La Geoseguridad asienta sus bases en la geoestrategia, en la geopolítica internacional y en la seguridad global, y permite estudiar y comprender los hechos locales o globales desde esta perspectiva. Además, los equilibrios de poder entre los diversos Estados tienen un efecto regional que se traduce en problemas geoeconómicos, geopolíticos y geoestratégicos.

Los retos de la Geoseguridad abarcan desde las materias primas, los conflictos del agua, el medioambiente, la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado, el terrorismo, la protección de personas, etc. Todos ellos temas de difícil control, por ser no sólo la causa sino el efecto de los grandes desequilibrios sociales y económicos que afectan al planeta.

La Geoseguridad viene a dar respuesta a las complejidades del mundo globalizado en el que se entrelazan los aspectos geopolíticos, geoestratégicos y geoeconómicos mencionados con la seguridad globalizada. Todo en un marco geo-referencial que trasciende a los propios estados, y su comprensión y abordaje requiere un eficaz sistema de información mundial en materia sociopolítica y de seguridad.

En este sentido, el dato y la información convertida en conocimiento y en poder, es más que nunca la clave de la competitividad actual de los países y  estados. La inteligencia económica ayuda a obtener la información competitivamente estratégica, y facilita su análisis para servir a objetivos institucionales y empresariales concretos. La inteligencia competitiva, sin embargo, no es espionaje industrial, sino que sus procedimientos de obtención de información pasan por Internet (fuentes abiertas) y por eficaces aplicaciones informáticas de búsqueda y tratamiento de la información, de vigilancia corporativa, de seguimiento de los cambios tecnológicos, de instrumentos para analizar la información sectorial, etc. Se trata de un elemento clave para comprender los movimientos estratégicos que afectan directamente a estos países y estados y, sobre todo, a las empresas que operan internacionalmente.

Estrategia Internacional y Geoseguridad

En un mundo globalizado, en muchos de sus aspectos, no basta conocer las causas y los agentes que las determinan, ni tampoco basta tener la información adecuada. Es preciso, además, establecer las estrategias que permitan lograr los objetivos empresariales, políticos o sociales dentro del marco de la seguridad que se quiera obtener.

Las consecuencias de la globalización afectan por igual a las sociedades y a las empresas y entidades públicas y privadas. Y en este último caso, cambian de manera determinante la cadena de valor de las empresas globalizadas. Tanto es así que, en muchos casos, la globalización de los mercados ocasiona pérdidas en la soberanía de los países, crean pobreza, afectan al medio ambiente y a la cultura local.

Todo ello, viene producido por, al menos, cinco causas: reducción de las barreras arancelarias, liberalización de los mercados, industrialización y modernización de las estructuras económicas, integración de los mercados financieros a nivel local, y profundos cambios tecnológicos; por tanto será la inteligencia el denominador común y protagonista.

En consecuencia, las empresas que pretendan ser unos actores importantes en el complejo mundo de la seguridad global deberán buscar de forma simultánea tres objetivos estratégicos: Construir unas eficaces redes de colaboración y cooperación; desarrollar una flexibilidad global de manera que pueda gestionar riesgos, amenazas y oportunidades a nivel local o regional; tener la habilidad de aprender de sus experiencias internacionales y transmitir ese conocimiento de una manera rápida y global

Es aquí donde se percibe con claridad la necesidad de desarrollar una estrategia ligada al conocimiento de las claves de la Geoseguridad.

La Geoseguridad, así definida, tiene más relación con la Seguridad Política, entendida como una ciencia de la seguridad del bienestar social y sus actores dentro del ámbito del poder, especialmente el Estado, y donde los intereses de seguridad y dominio se expresan en un espacio geográfico y en un tiempo, histórico, determinado.

Un ejemplo de la importancia práctica, aplicada, de esta disciplina nos lo darán los próximos programas de estudios universitarios que habrán de implementarla, pues se trata de que los directores de seguridad ubiquen y prevean los cambios necesarios en sus organizaciones, formando a sus directores en el contexto de las transformaciones sociales del mercado global.

En un marco político, el análisis de las estrategias en materia de Geoseguridad, decididas por los Estados están encaminadas a proteger su seguridad nacional o sectores bien definidos de la misma, adquiriendo el dominio de tecnologías claves y/o conquistando segmentos del mercado mundial relativos a la producción y a la comercialización de un producto o una gama de productos sensibles, que confiere a su poseedor un elemento de poder y de presencia internacional, que ayuda a reforzar su potencial económico y social.

Cluster de seguridad

En estos momentos la configuración del desarrollo económico y social  actual, caracterizado por una gran paradoja entre las fuerzas globales y la seguridad nacional en sus ámbitos regionales y locales, se ha convertido en espacio dominante de la nueva geografía de seguridad mundial, surgiendo así un concepto que ha cobrado mucha fuerza, como es el complejo productivo o conglomerado, más conocido como Cluster de Seguridad.

Podría decirse que los clusters son concentraciones geográficas de empresas e instituciones de excelencia interconectadas que actúan en determinado campo o actividad.

Pero, con todo ello, este análisis no se termina aquí. Hemos de seguir con el desarrollo de este nuevo concepto de la Geoseguridad en un marco de integración y convergencia de las seguridades y ésta es y será otra historia.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.